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    Fitur = Hospital de Béjar ¡¡¡Ya!!!

    Puerto de Béjar, a 28 de febrero de 2023

    Pepe Blanco Blázquez.

    Sin ningún género de duda, la Corporación Municipal de Béjar, con su presidente don Antonio Cámara, ha acertado al estar presente en la Feria de Turismo más importante del mundo. Esto es una buena inversión, porque se hablaba de Béjar y ello siempre es bueno: que se hable, que algo queda; ya que nuestra querida ciudad tiene que estar donde le corresponde. Lo pasado hay que olvidarlo, porque, quien pudo no quiso cambiar -años 60 y 70 –, ya no están entre nosotros. Yo sé, de buena fe, que se pudo cambiar el sistema productivo, pero… no quisieron hacerlo; diciendo que, en épocas de alta producción, si se necesitaban obreros, no los tendrían, porque se marcharían a otras industrias, porque sus convenios eran más altos.


    Béjar se conoce. Hace unos años un amigo de la capital me comentó que en la época de la nieve venir a esquiar a La Covatilla le salía más barato que en Guadarrama; y que comer toda la familia en Casa Pavón era una delicia; no pasa más de un mes sin regresar. Esto es lo que importa, que la gente venga a Béjar, porque “poco a poco se llena el granero”.


    También tenemos que ver en Béjar, entre otras cosas, un jardín renacentista de estilo italiano de los más bellos de Europa, El Bosque. Y todo esto, donde mejor se puede vender es en Fitur. Bejaranos, unidos sumamos más, que es lo que importa; hoy tenemos a don Antonio Cámara como alcalde, mañana puede ser otro…


    Dicho esto, Fitur es importante para dar a conocer Béjar; pero no es un tema menor luchar para que nuestra querida ciudad tenga lo que nos corresponde. No pedimos un AVE, no queremos un aeropuerto “sin aviones”, pero sí necesitamos un Hospital para toda la Comarca, porque nos pertenece. Tenemos, según mis contactos, 1.472 cartillas de Pediatría y, aún así, meses atrás muchos padres tuvieron que salir corriendo con sus niños a Salamanca. Además, 17.000 cartillas en Béjar y Comarca; y, contando pueblos del sur de Ávila y norte de Cáceres, que, por distancia – 20 km de media – necesitan dicho Hospital, llegamos a 35.000 cartillas, motivo más que suficiente para ser una necesidad justificada y urgente, urgentísima.


    Con dicho Hospital la ciudad prosperaría un poquito ¡qué falta le hace! y Camilo vendería más churros y cafés. Y en el comercio en general, con tanto desplazamiento, quedaría algo para mejorar la maltrecha economía de nuestro pueblo y dejaríamos de cantar lo que yo oía en mi niñez: “Salamanca, la blanca, quién te mantiene/ cuatro carboneritos que van y vienen” . Yo digo cuatro “bejaranitos”, cuatro de Ciudad Rodrigo, cuatro de Peñaranda, cuatro de Lagunilla, cuatro de…”.
    Además, señor Mañueco y su Consejero de Sanidad, señor Vázquez, para Sanidad la cuenta de resultados no vale; una buena salud a medio y largo plazo es una buena y gran inversión.


    Termino diciendo lo que dije en lo más alto del Covid: Para hablar de todos y cada uno de nuestros sanitarios de toda España las palabras siempre me quedan cortas y pequeñas, pero es que “para hablar de otros, no tengo palabras…”


    ¡Carajo! El Hospital de Béjar no es un capricho, es…una necesidad urgente, muy urgente.

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