Béjar, a 20 de mayo de 2023
Por Marciano Martín Castellano.

— ¿Tiene las mismas ganas que hace un año y medio para continuar luchando por los intereses de Béjar?
— Quizás más ganas. Este año y medio ha sido una vorágine porque, tras el COVID, ha habido que recuperar tiempo y avanzar rápidamente para aprovechar todas las oportunidades, sobre todo aquellas que gracias a los Fondos Europeos que se han canalizado a través del Gobierno de España no podíamos perder. Y esas ganas aumentan ahora porque hemos conseguido presentar un equipo excelente, con preparación, sabiendo cuál es el porvenir que queremos para que Béjar sea una ciudad en la que podamos vivir y trabajar, con personas que ya viene trabajando en el ayuntamiento desde hace años y con incorporaciones de gente joven que son el impulso que también necesitamos como grupo y que va a ser muy beneficioso para la ciudad.
— ¿Qué iniciativas nuevas tiene para afrontar los próximos cuatro años?
— La prioridad es lograr un futuro para que nuestra infancia y juventud pueda quedarse en Béjar. Que aunque tengan que salir a estudiar a otras ciudades, quieran y puedan seguir su vida en su ciudad. Nos vamos a implicar en evitar el abandono temprano de los estudios, de manera que todas las chicas y chicos terminen esos estudios de bachiller o de formación profesional que les va a facilitar su camino posterior. Al menos, eso.
Por supuesto ver que es una realidad el Centro de Concentración Deportiva en La Covatilla, un empeño de mucha gente para aprovechar las infraestructuras los 365 días del año, imbricándolo con el resto de instalaciones deportivas excepcionales que tenemos en Béjar. Es un modelo en el que trabajamos varias líneas de actuación, desde el deporte de competición y élite hasta el más aficionado, con entrenamientos en instalaciones de gran calidad, y que fomenta además la salud pública, que tanto nos interesa a quienes tenemos responsabilidades con nuestra ciudadanía.
Nuestras personas de más edad tienen que poder elegir dónde vivir y cómo desean ser ayudados. Y para ello vamos a trabajar entre otras cuestiones en la formación continua del personal que compone los equipos de Asistencia Personal y Ayuda a Domicilio con el objetivo de ampliar su cualificación y especialización, o el fomento de las viviendas colaborativas.
— ¿Se muestra confiado en obtener ahora la mayoría absoluta para poder gobernar?
— Esto más bien es un deseo. Sí que aprecio un apoyo grande de la ciudadanía, pero nunca hay que dar nada por hecho. Lo que ofrezco y hago, y hacemos todo el equipo, es trabajar y trabajar.
— ¿Qué ha aprendido de estos dos últimos años?
— Mucho. Cada día una cosa nueva, o varias. Porque un Ayuntamiento es una gran empresa que tiene muchas áreas y hay que coordinar todas. Pero una cosa, más que aprenderla, la he confirmado y afianzado en mi forma de actuar. Ganas más con una negociación pacífica en la que no pretendas solo ganar tú. El diálogo, el trato sosegado y el respeto, consiguen muchos más y mejores resultados que el enfrentamiento.
— ¿Cómo afronta la campaña electoral?
— Con mucha ilusión, con mucha fuerza y con ganas de seguir ofreciendo a la ciudadanía lo mejor de este grupo de personas que nos presentamos a culminar los proyectos que ya hemos puesto en marcha y aquellos que están por venir. Por otro lado, queremos que sea una campaña sosegada, donde cada quien defienda sus ideas en libertad y con claridad, sin enredar a la ciudadanía con falsas esperanzas. Siempre he defendido que es mejor trabajar calladamente y obtener resultados que anunciar cosas que nunca se van a cumplir. No juguemos con las esperanzas y las ilusiones de la gente.
— ¿Fue difícil luchar contra la pandemia?
— Muy difícil. Por un lado porque nunca nos habíamos enfrentado a algo así desde un ayuntamiento. En realidad, ni siquiera personalmente. Pero también porque por parte de nuestra administración más cercana, que es la autonómica de Castilla y León, no recibimos el apoyo necesario. Desde el primer momento los ayuntamientos tuvimos que hacernos cargo del acopio de mascarillas, geles, organizar las infraestructuras sociales para que nadie de nuestra ciudadanía quedase en desamparo, para evitar incomunicaciones y que hubiese quien no tuviese sus necesidades vitales cubiertas. Para ello nos pusimos manos a la obra desde el primer momento
— ¿Cuál es el proyecto estrella de la nueva legislatura?
— El proyecto estrella es que Béjar recupere líneas de negocio que permitan el progreso de la ciudadanía. Ponemos el foco en el apoyo a las empresas que quieran instalarse, también en sectores como el del deporte, gran generador de flujos económicos, además de lo que tiene que ver con la salud pública y el bienestar de la gente. Potenciaremos sectores como el tecnológico, y dentro de él la ciberseguridad, demasiado centralizado en las grandes ciudades. Y, por supuesto, la formación de la juventud. No se trata de proyectos estrella sino de un conjunto de acciones que incluyen varios sectores de producción, con el fin de no repetir lo que ha pasado anteriormente, que al existir solo un modo principal de producción, si éste cae, cae toda la economía de la ciudad.
— ¿Qué le quedó pendiente de hacer de la legislatura que no pudo desarrollar?
— Pues bastantes cosas que han sido inviables por causa de la pandemia. Muchas de las cosas que planteábamos en el programa presentado en 2019 no se han concretado. Pero alguna de ellas no caen en el olvido y, si hay oportunidad y fondos, como los que nos vienen de Europa, serán proyectos que ejecutaremos.
— ¿Qué balance hace de la pasada legislatura?
— Una legislatura muy convulsa, quizás como nunca ha ocurrido en nuestra ciudad. Pero también una legislatura en la que hemos sido capaces de reconducir las situaciones, como grupo municipal que sabe gobernar, y hemos aportado soluciones satisfactorias que han permitido que la ciudad esté en un momento de progreso y crecimiento enorme.